Implica la vigilancia permanente del consumo energético del cliente, sus variables fundamentales y el coste asociado que supone.
Para ello se emplea una plataforma on-line para gestión energética que realiza de forma automática la telemedida del contador, el análisis de los datos descargados, envío de alarmas, informes, …
La monitorización del consumo implica alarmas por demanda de potencia y comparativo con el histórico de consumos y/o la curva de carga prevista.
La monitorización del coste implica la comprobación de las facturas emitidas por la compañía comercializadora, con el objeto de verificar que son correctas tanto en consumos como en costes, y no existen desviaciones respecto a lo pactado en el contrato de comercialización.
Si se detectasen incidencias en el consumo, se enviarían alertas a los responsables para su conocimiento. Si se detectasen incidencias en la facturación, se emitirá borrador de reclamación justificada a compañía y, una vez revisado y firmado por el cliente, se tramitará con compañía.
La monitorización puede usarse tanto en el contador principal como en otros elementos de medida (sub-metering) que puedan instalarse como medida de eficiencia energética.